Nos visitó el actor Antonio Blanco, que hizo su representación en el gimnasio en presencia de todos los alumnos y profesores del centro.
Pasamos un buen rato de cultura y humor.
Caracterizado como un esclavo romano que había perdido de vista a su amo, se dispuso a representar una serie de mitos clásicos.
El primero fue el mito de Pigmalión, personaje de la mitología clásica que se enamoró de una estatua, creada por él mismo.
Siguió el mito de Faetón, joven hijo del Rey Helios, que pidió a su padre el deseo de conducir el carro del sol.
Otro mito adaptado fue el del Juicio de Paris, germen de la Guerra de Troya.
Para ayudar a representar este mito, disfrutamos de la colaboración de Hugo, de 4º de la ESO, que actuó de modo impecable y profesional, haciendo dos papeles, el de Zeus y el de Paris.
Finalmente, como despedida, pudimos disfrutar de una recreación de las ninfas, representadas por Carmen, asediadas en los bosques por los sátiros, representados magistralmente por Antonio, alumno del ciclo formativo de Gestión Administrativa.
De estos mitos de la antigüedad clásica se pueden extraer paralelismos en la actualidad y sacar enseñanzas y ejemplos de ellos: como puede ser las personas enamoradas de manera enfermiza, los hijos que manejan imprudentemente los vehículos de sus padres, los peligros de los enamoramientos prohibidos o de los excesos que se cometen en las fiestas de nuestros jóvenes.
En fin, con buen sabor de boca comenzamos la mañana del jueves, gracias al carácter intemporal de la antigüedad griega y romana.